Antes Dios era un ojo que veía todo: lo pasado, lo presente,lo futuro y hasta los más ocultos pensamientos.
Hoy ese Dios se llama La Intelné.
Por el proceloso mar de Internels navegan sigilosos y oscuros secretos, miserias, cuentas pendientes y asuntos de los que mejor no hablar , perversiones , calumnias repugnantes, deseos deshonrosos, el dinero más sucio, las pulsiones de millones de adolescentes morreando las heces...
Pero todo se sabe. Navegas dejando mucho rastro. En tu empresa saben tus debilidades, las páginas que merodeas, las cuevas donde andas pringado. Y si un día tienes un problema, lo sabe la policía. Todo lo bueno y lo malo está dentro de las tripas de tu ordenador. Eso no es biodegradable.
El Dios del ojo dentro del triangulito es una profesora de kindergarden al lado de este otro Ojo , que alcanza de verdad tu presente, tu pasado, tu futuro , y hasta tus más ocultos pensamientos.
La diosa Intelnés hace acopio en su memoria de millones y millones de datos de tu vida e, insisto, tu empresa también. Es un guirigay infinito de redes, de chips de silicio, de conexiones, que ni el más poderoso haya podido soñar tener.
Nos gusta pensar que somos libres, ¡ja!: para ser libre deberías desenchufarte de todo este montaje...¿quién se atreve?
Somos esclavos en la Red - ¡perfecta la palabra!. Encadenado a un centro de datos a merced del poder, del embaucador, del timador, del fanático , del carnívoro sexual , dispuesto a sacarte hasta el último cartílago.
Desde el mismo día que que inicié mi página en Linkedin, Serunión, la empresa de la que me fui, me sigue a diario : "dos personas de Serunión te han leído" me advierte.
¿Es amor?, ¿nostalgia?, ¿preocupación por mi vida profesional?: ¡nooooo!, es el Ojo.
Yo también me largué una temporada de la empresa y una de las excusas fue, además de la sindical, la del catering de Serunión... ¡qué poca cantidad y variedad de comida!, además de que nos cobraban la ensalada, cuando la anterior concesionaria siempre nos la dio "gratis et amore" y "ad libitum".
ResponderEliminarEso sí, mucho "atrezzo" y cartelera, quiero decir, que se comía mucho mejor con la vista gracias a los magníficos posters, que no postres, que colocaron para decorar el comedor.
Suso, creo que hiciste bien en largarte de esa impía unión, pues en el caso que cuento consiguieron la contrata a base de rebajar unos milloncetes (de ptas) la oferta. A los pocos meses ya se quejaban de que no les llegaba el presupuesto... ¡Fantasmas!